La Leyenda del Mago Gris [Privado/Asthar]

-Misdent. -Fue lo que dije cuando Nitry lo menciono, quizas Misdent sepa el paradero de Mireia, quizas Misdent sepa que diablos le ha pasado y si aun es tiempo para hacer algo aunque ella no es debil para nada me preocupa, si entrene mis fuerzas hasta ahora fue para esto... Para proteger.
-Perdoname Misdent... Pero necesito tu ayuda. Fue lo que dije en mi mente al acercarme al florete, lo unico que pasaba por mi mente en este momento era ayudar a Mireia, encontrarla de una vez por todas, asi que agarro a Misdent con mi mano derecha...
-Blanche, espero que escuches mi suplica pero... Ayudame a encontrar a Mireia. Fue lo que dije, como si fuera una clase de susurro para mi mismo mientras agarraba a Misdent.

Por un momento todo volvio a ser oscuro, por unos segundos mis sentidos se pusieron mas alertas que nunca mientras intentaba averiguar en donde me encontraba hasta que escuche una muy reconocida voz... Al escucharla solo doy una media vuelta, mientras pronuncio su nombre con seriedad.
-Blanche. dije mientras la miraba fijamente a los ojos intentando averiguar que tenia que responder.
-Tu eres una diosa Blanche... Tu deberias saber si es bueno o no confiar en mi, aunque el punto por el que te he suplicado a ti, ignorando mi orgullo es Mireia. Dije con un semblante serio, sabiendo que ella puede estar en peligro o no.
-¡Quiero protegerla en este momento, no es tan dificil!

-Es graciosa la cantidad de veces que he escuchado eso... Dije para mi mismo, mientras me aguantaba el enojo que tenia en mi interior por mi incapacidad para haberla protegido... Si hubiera eliminado el problema de la Raiz, destruyendolo... Quizas hubiera sido diferente, pero no se si eso seria lo mejor...
-Mi capacidad para rastrearla es actualmente nula por algun motivo, ¿Que podemos hacer? Le pregunte posiblemente... A la forma humana de Misdent.

"Recuerdo haber leido algo acerca de los Alvan... Perfecto, seres de otra dimension que pueden leer mi mente, ¿Algo mas, Blanche?" Fue lo que pense, sin importarme el hecho de que ella pudiera leer mi mente, aunque sea molesto sin duda alguna no puedo quejarme, ayudara a encontrar a Mireia y con eso me basta.
-¿Y es necesario que tengas que leer mi mente? Es algo molesto, pero que mas da. -Dije, claramente molesto por esto.
Aunque cuando pidio algo que perteneciera a ella no pude evitar recordar este viejo amuleto, busque arduamente en mis bolsillos y sin duda alguna lo encontre... Siempre lo he llevado conmigo y no lo recordaba... Siempre lo he llevado conmigo.
Me acerco a la mujer con cara de pocos amigos, y le entrego el amuleto. "Aun recuerdo cuando me entrego ese amuleto, eramos apenas dos niños que no sabiamos nada del mundo, te servira".

No pude sentir como esos Drukach se habian acercado, no pude sentir en ningun momento su presencia quizas por estar tan concentrado en mis objetivos de salvar a Mireia, no pude evitar entrar en una furia extrema y destructora en el momento en que vi a esas bestias atacar a Igran, un sentimiento que vivi solo una vez en mi vida hace mucho tiempo... Gracias a Darius.
-¡IGRAAAAN! -Grite, mientras iba a rescatarlo pero la chica Alvan ya se habia encargado de ellos... Alli estaba Igran tirado en el suelo, empezando a perder una cantidad enorme de sangre, no sabia que hacer, no sabia si lo podia salvar, pero el aun asi me estaba observando... ¿Con tristeza? No entendia porque me miraba asi... Era como si hubiera visto en mi alma y en mi futuro, hace unos segundos se defendio agonicamente y ahora esta tranquilo... Me agachaba para tocar sus heridas y ver la manera en la que podia intentar salvarlo aun sabiendo de que era inutil, mientras decia con demasiado nervio en mi voz "No, no, no..." una y otra vez.
-¡Vamos... Vamos Igran, no puedes morir... No aqui, tu... Tu no mereces esto...! ¿Igran...? Dije al aire, mientras observaba como empezaba a cerrar los ojos y este ponia su cabeza en mis hombros, como su normal caricia hacia mi persona... Hasta que su corazon se detuvo, y cerro sus ojos...
Y las lagrimas empezaron a recorrer mis ojos, mientras me mantenia en silencio, en un total y profundo silencio... Igran no tuvo una vida libre, Igran no crecio para volar el solo por el cielo azul, haciendo su propia vida... Igran murio; por culpa de esta aventura...
Y aunque era imperceptible, pero poco a poco empezaba a generarse una gran cantidad de magia oscura en mi corazon y lo podia sentir, pero no me importa, nada me importa en este momento... Solo quiero... Silencio... Igran no puede morir asi... Igran tiene que acompañarme... Siempre. ¡SIEMPRE!