Las arenas traicioneras de una tierra lejana [Priv.Tomato]

-Como lo desees en todo caso Mallory, ya te habia dicho de que yo solo tengo una palabra pero comprendo tu falta de confianza. -Le dije totalmente tranquilo con una sonrisa en mi rostro, mientras me alejaba para ir a tomar aire yo solo despues de tanta basura.
-Pero estoy seguro de que tu haras algo en mi contra Mallory, y yo estare esperandolo... Asi que de nada sirve que seas tan educado y cordial, ya sabemos lo que sucedera mas adelante, ¿No lo crees? ¡Jajaja...! Levanto mi mano en señal de despedida, yendo para el jardin esperando tener algo de tranquilidad, para esperar a la media noche.

Ese es al final el camino el cual he recorrido. Deseo vengarme del maldito Galliwyx por lo que ha hecho, pero eso no tiene mayor importancia actualmente. Estoy en medio de gente que desea matarme por razones ajenas a mis acciones, tengo encima a los malditos dioses de Jubail, al maldito de Jastor, al Mallory por mas que lo esconda... Pero si para sobrevivir los debo de asesinar a todos, entonces que así sea. Mi espada y mi voluntad están esperando el momento en el que el juicio de los Dioses intente caer sobre mi... Para demostrarles el poder de Ashtar Alarion, y su convicción de alcanzar la grandeza y el poder para un mundo mejor.

Observaba con interés el duelo que acababa de encontrar, era algo curioso sinceramente... Pero ahora que no tengo el control de mi magia, no puedo ocultar mi presencia oscura... Y eso es una molestia dado este caso. -No hay necesidad de detener un duelo tan curioso, señores. ¿O desean tener a un contrincante mas en lo que parece ser una honorable batalla? Me vendría bien, considerando de que tengo que empezar a calentarme para lo que se esta aproximando. -Comento con total apatía, intentando no dar demasiados detalles pero dejarles con curiosidad.

-Un combate sin magia eh... Por mi no hay ningun problema señor, aunque me sorprende de que usted sepa mi nombre. ¿Nos habremos conocido en algun punto de nuestras vidas, o tiene relacion con mi familia? -Pregunto mientras lo observo fijamente, una espada sera suficiente para luchar contra los dos, pero tendre que dar un buen espectaculo. Por lo que acabo de ver, uno de ellos se rige por la destreza y la elegancia, mientras otro utiliza la fuerza bruta para luchar... Muy interesante.
-Estoy seguro de que nuestro espectador encontrara mas gratificante el luchar todos contra todos. ¿O me equivoco? -Comento en voz alta, mientras esperaba sus reacciones.

-Bueno, supongo que es más que lógico el tener en estas tierras esa fama... Que se le puede hacer. -Dije totalmente de forma despreocupada y descarada, no es que me importe sinceramente... Las palabras de los demás no son nada más que aliento desperdiciado a mi parecer.

Ya estábamos preparados, y era lógico que el orco se iba a lanzar hacia mi. Por alguna razón, mi presencia simplemente es una molestia para ellos... Pero de cierta manera, me facilita las cosas. Mi objetivo es enfrentar la habilidad de este hombre, ya que este ser salvaje sin su fuerza no seria nada. -Buen intento. -Fue lo que dije mientras usando la fuerza del orco en su contra, estiraba mi pierna izquierda y con mi mano izquierda me agacho y dado que se ha lanzado hacia mi persona, me lanzo hacia adelante con mucha destreza y levanto su pie izquierdo con un leve golpe de mi mano. -Wooohh... -Una vez levantado, hago un giro de 180 grados con mi pierna derecha para impactar rápidamente el pie que aun se mantenía fijo en el suelo para hacerle perder el balance y una vez en el aire, saltar para dejarle marcado mi pie en el rostro del orco y chocarlo contra el suelo con otro salto de una fuerza considerable, todo esto en cuestión de segundos aprovechando su embestida. Pero por todo esto, no pude lograr evadir bien ciertas estocadas del guerrero pero en cuanto me recupero, utilizando mi espada imitaba sus movimientos, haciendo que nuestras espadas chocasen cada vez que uno de los dos atacaba, con la misma táctica y estilo... Asi lograre comprender sus fortalezas, y podre idear un plan totalmente ideal para su estilo de combate. -Interesante. -Es lo que comento con una sonrisa tranquila en mi rostro, siempre manteniendo vigilado con mis sentidos al orco para que no me tome desprevenido.

Interesante, sin duda alguna, interesante. Su manera de luchar es simple... Ataca los puntos de apoyo y equilibrio de su rival, dejándolos en una clara desventaja de unos segundos que bien podría considerarse en una batalla real la muerte de uno de los dos luchadores. Pero en este caso, no planeaba rendirme, con una sonrisa en mi rostro le hablo al hombre que presionaba la punta de su espada en mi garganta. -Idiota~
Yo tenía vigilado mi entorno, por lo cual no me había asustado mucho, el orco me ayudo justo cuando lo necesitaba... Ademas, me entrego un arma mas. -Un kukri... Interesante. Agarro con mi mano izquierda el kukri, sin levantarme. Pero en cuestión de un par de segundos, canalizando toda mi fuerza decido hacer un "kip-up" y levantarme de un fuerte salto, aunque al inicio esto no parece ser muy lógico, al canalizar la fuerza del salto y caer en cuclillas, le lanzo con una fuerza quizás incluso mayor el kukri al orco directo con la intención de darle un corte semi-profundo en el abdomen. -Después de enfrentarte a un ser abismal... Tu eres como una ovejita blanca e inofensiva. -En mi rostro se reflejaba la experiencia que había ganado en esa situación... Había superado el miedo, parece incluso que mi sola presencia da una sensación oscura y terrible, incluso aun cuando no tengo magia. Esperaba que con mis palabras el se lanzara hacia mi, porque esta vez usaría su fuerza en su contra de una manera diferente. Usando movimientos versatiles para moverme alrededor de el me haya o no atacado, le empezaria a hacer varios cortes leves en zonas vitales. Los brazos, las piernas, cortes en su rostro, la zona de los tendones... Y esperar poco a poco, para que se enfurezca mas y mas, y en uno de sus golpes mas fuertes, usar la inercia de su arremetida para usar mi rodilla para impactar en su mentón, junto con mi codo para acabar de rematarlo y dejarlo inconsciente, haciendo temblar su cerebro con una fuerza temible.
Claro es, que jamás le quitara la vista encima al noble ese... Pero con el, seria otra táctica. No debo de dejarle opción de desequilibrarme, por lo cual mi defensa estaría totalmente establecida a mantenerme siempre estable y firme y luchar contra el, en base a pura velocidad.

Una vez el orco ya fue eliminado, solo faltaba destrozar al noble. Sinceramente el iba a ser un difícil oponente, su habilidad es simplemente algo peculiar, lanzando ataques certeros parece ser que lograba su objetivo: Debilitarme. Quizas debia haberlo eliminado a el primero... Pero eso ya no es algo de importancia. Al parecer, esas heridas me han debilitado y ahora... Esperen un momento, este escalofrío ya lo he sentido antes... -Maldicion... Dije antes de caer desmayado en el suelo.
Aunque bueno, relativamente, que ahora tengo enfrente a otro dolor de culo. Su ironía siempre me ha causado gracia, lo que hace esbozar una sonrisa en mi rostro. -Oh, muchas gracias, me inspire en tu cadaver. -Dije con cierto tono de burla, mientras observaba a mi alrededor. -Pues mira... Incluso nuestro parque de diversiones ha sido afectado por aquella bestia... Darius, tu y yo sabemos que me has ocultado siempre toda la información. Posiblemente tu grupito de idiotas amantes de Sithis este detrás de esto. ¿Me equivoco? Dije observando seriamente su rostro putrefacto.